La salud mental es algo que me preocupa profundamente. A lo largo de los años, he visto cómo los problemas mentales pueden afectar a las personas de maneras que no siempre son visibles, pero que tienen un impacto increíble. Esas experiencias han dado forma a mi pasión por crear espacios en los que las personas se sientan seguras, apoyadas y realmente atendidas.
Lo que más me motiva es la posibilidad de marcar la diferencia, ya sea ayudando a acabar con los estigmas, manteniendo conversaciones abiertas y sinceras o abogando por la atención. Creo que todo el mundo merece sentirse escuchado y disponer de los recursos que necesita para recorrer su camino hacia la salud mental.
Para mí, esto no es sólo un interés profesional: es personal. Me esfuerzo constantemente por aprender más, escuchar mejor y contribuir a un mundo en el que se dé prioridad y se apoye el bienestar mental.
