Creo que la terapia puede ayudarnos a todos a crear sentido, a desarrollar la autoconciencia y a determinar cómo podemos ser más eficaces independientemente de nuestras circunstancias. Les digo a mis clientes todo el tiempo que no hay una guía para la vida, todos estamos aquí tratando de hacerlo lo mejor posible con las habilidades que tenemos. La terapia puede ser un lugar seguro para explorar nuestros pensamientos y sentimientos más íntimos y averiguar qué queremos de la vida, o quién queremos ser, y proporcionarnos habilidades tangibles para alcanzar nuestros objetivos. La terapia nos ayuda a analizar las habilidades que hemos desarrollado, a veces por necesidad, y a determinar si esas habilidades son las más eficaces o si ciertas habilidades ya no sirven para nada. Me apasiona adoptar un enfoque centrado en la persona y guiar a los clientes en su viaje para convertirse en la mejor versión de sí mismos. La vida está llena de altibajos, y mi deseo es ayudar a los clientes a identificar sus fortalezas, recursos y objetivos, y trabajar para crear un cambio positivo en sus vidas.
Creo en la utilización de una multitud de habilidades y prácticas basadas en la evidencia dentro de las sesiones. Combino la Terapia Dialéctica Conductual, la Terapia Cognitivo-Conductual, la Terapia Centrada en Soluciones, la Entrevista Motivacional, la Terapia de Aceptación y Compromiso, la Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares y las habilidades de Mindfulness en un enfoque centrado en la persona que proporciona herramientas prácticas para manejar los desafíos de la vida.
Mi formación académica incluye una maestría en Ciencias Psicológicas Aplicadas de la Universidad del Pacífico y una licenciatura en Psicología de la Universidad Estatal de Portland. Soy un consejero certificado de alcohol y drogas, así como un supervisor clínico aprobado.
